Una próspera y tranquila nación centroamericana está abriendo los telediarios de todo el mundo por la atención que le ha puesto el presidente Donald Trump. El republicano no dejó pasar ni 24 horas desde que juró el cargo para mentar un tema al que no le saca el pie últimamente: el de la presunta gestión china del Canal de Panamá –“no se lo dimos a China, sino a Panamá, y lo vamos a retomar”– y el de los pagos que, como los buques de cualquier país, deben hacer los de bandera norteamericana para utilizar la vía interoceánica –“están sobrecargados de tarifas y no los tratan de manera justa”, dijo–.
Hasta que el empresario retornó a la Casa Blanca, nunca antes EE.UU. se había quejado de la gestión que ha hecho Panamá del Canal desde el 31 de d…
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