Avanzando ya el mes de julio, en el hemisferio norte muchos se preparan para salir volando de casa rumbo a cualquier parte; a cualquiera donde se sientan esperados y bien acogidos, por lo que ya acomodan las maletas en el coche, el autobús o el avión y no ven la hora de meterlas en el armario de una habitación de hotel o de… un crucero.
En el crucero son todos bienvenidos. Es el buque en sí el que no siempre lo es, y esto en ciertos destinos que ya muestran sobresaturación. En Palma de Mallorca, por ejemplo, está en vigor desde 2022 una restricción al número de estos barcos que pueden entrar cada día a puerto: solo tres. Anualmente llegan por esa vía 2,5 millones de pasajeros, y aunque no todos bajan a tierra, una gran parte sí, lo que pare…
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