Cuando, en 1970, se estrenó Love Story, su historia de un gran amor marcado por la enfermedad y la muerte conmovió a un amplio público, no sólo gracias a la célebre música de Francis Lai, convirtiendo la película en una de las de mayor éxito comercial.
En Vivir el momento, John Crowley –conocido principalmente por Brooklyn– ofrece una actualización de este tema atemporal, una especie de “Love Story 2.0”. La historia gira en torno a Almut, una entusiasta joven cuyo diagnóstico de cáncer de ovarios avanzado altera drásticamente su vida y la de su esposo Tobias. La pareja se enfrenta a cuestiones existenciales: ¿debería Almut someterse a un tratamiento agotador y de resultados inciertos, o aprovechar al máximo el tiempo que les queda juntos en…
Contenido para suscriptores
Suscríbete a Aceprensa o inicia sesión para continuar leyendo el artículo.
Léelo accediendo durante 15 días gratis a Aceprensa.