Nacido en 1989 en Hamar (Noruega), el director, guionista y productor Henrik Martin Dahlsbakken ha realizado en 14 años ocho cortos, una serie de televisión y catorce largometrajes de todo género, aunque sin mucha proyección internacional. Ésta le puede llegar ahora con The Arctic Convoy, notable película bélica basada en hechos reales poco conocidos fuera de su país. El resultado es sólido, gustará a los aficionados al género y puede abrir a Dahlsbakken las puertas de Hollywood.
En el verano de 1942, un año después de la invasión alemana de la URSS, parte de Islandia el convoy PQ-17, compuesto por 41 barcos aliados militares y mercantes. Su objetivo es bordear el Ártico por el Mar de Barents durante 12 días, para llevar hasta la ciudad rusa de Murmansk toneladas de armamento y víveres; pero, por un ataque alemán, el convoy se dispersa. Queda especialmente desprotegido –sólo tiene un cañón antiaéreo– el carguero noruego que capitanea Skar, un viejo lobo de mar, muy crítico con la cobardía del gobierno noruego y cuyo sentido del deber le lleva a intentar llegar a Rusia sin escolta. Esto le enfrenta a su primer oficial, el temeroso Mørk, que piensa –como gran parte de la tripulación– que deben regresar a Islandia.
Aunque no depara ninguna sorpresa narrativa ni formal, la realización de Dahlsbakken dosifica la intriga y la acción con inteligencia, espectacularidad y sentido del ritmo, y mima a los variados personajes, todos ellos con conflictos dramáticos de interés y encarnados con sobria eficacia. En este sentido, se agradece que el guion no extreme las situaciones en el duelo central entre el capitán y su primer oficial, en la temeraria resolución del artillero Johan, en la creciente atmósfera claustrofóbica dentro del barco –siempre al borde del motín–, en la progresiva fragilidad física y mental del jefe de máquinas Erik o en las dudas del contramaestre Lars y de la telegrafista Ragnhild, la única mujer a bordo. Todo ello, sin los efectismos de ciertas películas bélicas de Hollywood, pero muy emocionante en su homenaje a esos héroes anónimos de la Segunda Guerra Mundial.
Jerónimo José Martín
@Jerojose2002
