Lucas trabaja en un parvulario de un pueblecito danés. Los niños le adoran y él disfruta con ellos. Divorciado, añora a su hijo adolescente Marcus, al que ve poco. Bien integrado en la comunidad local, ha iniciado una nueva relación y comparte camaradería con un grupo de cazadores. Tal equilibrio sufre un vuelco cuando la pequeña Klara hace creer a la directora del parvulario que ha sufrido abusos sexuales. La piedrecita se convierte en enorme bola de nieve que podría arrollar a Lucas.

Potente película de Thomas Vinterberg (Celebración, Submarino), con guion suyo y de Tobias Lindholm. Describe una moderna “caza de brujas” propiciada por una sociedad hipersexualizada. Las nuevas y fanáticas supersticiones surgen en un contexto donde las perversiones sexuales abundan, y los niños están expuestos no solo a ser víctimas directas, sino a recibir todo tipo de “inputs” a través de los medios de comunicación, sin entenderlos completamente, como es natural. Así, Vinterberg pinta la paradoja de una sociedad permisiva en lo sexual, y que al tiempo sobreprotege a los críos de modo tal que no se sabe quién es más inmaduro: si ellos o los adultos. Los comportamientos injustos, aun con recurso a la violencia, se pintan con crudeza, incluido el electrizante momento de la misa de Nochebuena, un reproche a una comunidad que ha convertido la celebración del nacimiento de Jesús en poco más que un acto social.

La historia requiere a un actor sólido, y La caza cuenta con él. El cada vez más en alza Mads Mikkelsen entrega una interpretación sensacional, premiada en Cannes.

Contenido exclusivo para suscriptores de Aceprensa

Estás intentando acceder a una funcionalidad premium.

Si ya eres suscriptor conéctate a tu cuenta. Si aún no lo eres, disfruta de esta y otras ventajas suscribiéndote a Aceprensa.

Funcionalidad exclusiva para suscriptores de Aceprensa

Estás intentando acceder a una funcionalidad premium.

Si ya eres suscriptor conéctate a tu cuenta para poder comentar. Si aún no lo eres, disfruta de esta y otras ventajas suscribiéndote a Aceprensa.