Iris y Josh se enamoran a primera vista. Un flechazo en toda regla. Iris confiesa que ha sido inmensamente feliz en su vida dos veces: cuando conoció a Josh y cuando lo mató. Con las cartas sobre la mesa en la primera escena, el espectador sabe que lo que viene no es una historia de amor, sino un thriller más o menos gore, más o menos retorcido que cuenta la conflictiva relación entre seres humanos y robots.
Como toda distopía, y esta lo es aunque ese futuro parece cada vez más presente, la cinta esboza algunos conflictos éticos; desde la moralidad de tener un robot acompañante afectivo-sexual, hasta la importancia de la libertad y la responsabilidad que se manifiestan como muro divisorio entre humanos y androides. Pero el tono de la pelíc…
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