Wade Wilson está en horas bajas y quiere dejar atrás su pasado como Deadpool, después de fracasados intentos por ser un superhéroe de verdad. El problema es que la Autoridad de Variación Temporal le ha dicho que su mundo va a desaparecer por completo… a no ser que vuelva a la acción, junto al mejor Lobezno de todo el multiverso.
Lo que caracteriza a esta nueva película del universo cinematográfico Marvel es, al igual que en las dos anteriores, su ritmo endiablado y, sobre todo, el guion, cargado de bromas metacinematográficas –esta vez, apenas se rompe la cuarta pared– y humor zafio e irreverente. A esto hay que añadirle secuencias de lucha realmente espectaculares, y una violencia gore extrema, no apta para los más sensibles. Por otro lado, la historia requiere estar al día en los entresijos de muchas de las películas y series de Marvel, lo que, a más de un espectador, le impedirá seguir el hilo narrativo y se preguntará “¿qué está sucediendo?”.
Jaume Figa Vaello
@jaumefv