El filósofo y crítico de arte Arthur Danto reúne aquí seis ensayos de clara intención filosófica que mantienen un aire de familia: responder a la pregunta “¿Qué es el arte?” El primero es una narración de la historia del arte hasta la actualidad, desde la propia teoría hegeliana de Danto de “el fin del arte” (ver Aceprensa, 12-01-2000 y 19-10-2005); los que le siguen abordan el significado de las Brillo Box de Andy Warhol, la restauración de la Capilla Sixtina, el cuerpo en la filosofía y en el arte, la fotografía, la estética kantiana y el futuro de la estética.
Como filósofo, Danto asume la tarea de responder a la pregunta ontológica por el arte. Y su contestación, lejos de ceder a una postura posmoderna (todo vale) o a la teoría institucionalista (es arte lo que una institución con poder decisorio dice que lo es), encuentra dos rasgos definitorios que estarían en la base de cualquier obra plástica producida a lo largo de la historia: “Algo es una obra de arte cuando tiene un significado –trata de algo– y cuando ese significado […] se encarna en el objeto en el que consiste materialmente la obra de arte”. Significación y encarnación.
Se puede pensar que es un denominador común suficiente para abrazar objetos realizados desde la Antigüedad hasta nuestro presente; pero más allá de la conclusión de Danto, cabría seguir haciéndose preguntas por la calidad de esa encarnación (y entonces la discusión estética vuelve al primer plano de las consideraciones artísticas), y por la incidencia profunda de las obras artísticas en la vida de las personas (y entonces la consideración de la belleza también regresa, como una de esas realidades que con mayor hondura conmueven e interpelan el corazón humano; y no menos la de la verdad, como conexión con el conocimiento sapiencial de la vida humana).
Además de su precisión analítica, Danto pone en juego una amplia capacidad de interpretación y de aporte de referentes culturales y filosóficos; demuestra buenas dotes de comunicador de ideas, de razonador ante una audiencia; y queda patente su voluntad de alcanzar verdad en el abordaje de los diversos problemas. Su Qué es el arte interesará a lectores con conocimientos filosóficos y al tanto de la historia del arte contemporáneo, conscientes de las filiaciones hegelianas del autor y capaces de valorar críticamente el fundamento y el acierto de sus interpretaciones antropológicas y teológicas de algunas obras de arte.